Condicionamiento Operante
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Es una forma de aprendizaje mediante el cual un sujeto tiene más probabilidades de repetir las formas de conducta que conllevan consecuencias positivas y, por el contrario, menos probabilidades de repetir las que conllevan consecuencias negativas. El condicionamiento operante es un tipo de aprendizaje asociativo que tiene que ver con el desarrollo de nuevas conductas en función de sus consecuencias, y no con la asociación entre estímulos y conductas como ocurre en el condicionamiento clásico. Como explicó Skinner (1948), el condicionamiento operante se produce cuando un organismo interacciona con un sistema que proporciona recompensas como respuesta a un tipo de conducta. Un animal de laboratorio aprende a apretar una palanca para obtener la comida.
En el caso del Neurofeedback, la conducta a expresar, puede ser la producción de un tipo determinado de onda.
Por ejemplo: Detectamos en el mapeo cerebral que un paciente tiene un déficit de ondas alfa y asociado a ello, tiene incapacidad para relajarse, se encuentra constantemente ansioso y preocupado. A través del Neurofeedback y utilizando el condicionamiento operante, podemos enseñar al cerebro a incrementar la cantidad de ondas alfa y así modificar los síntomas de ansiedad y preocupación.
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¿Cómo funciona el condicionamiento operante?
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Cada vez que el evento se produce, (en este caso el incremento de alfa), el cerebro recibe una señal indicándole que el evento se ha producido, adicionalmente recibe también una recompensa por haberlo conseguido. El cerebro interpretará esta recompensa como deseable y aprenderá a alcanzar ese estado para volver a obtenerla y conseguir así una nueva recompensa (en nuestro ejemplo es la producción de alfa).
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